sábado, 15 de diciembre de 2012

Consultorio sentimental


Y Gus me pregunta a través del blog “¿qué le leo a Palomita?”.

Se abre la encuesta ad hoc en mi casa. ¿Qué lecturas le interesaban a Cami cuando tenía siete?

Emi y More: Tienen dos, casi tres. Quedan fuera de la muestra.

Cami: Me mira y sigue con el libro de turno. (Ojos que miran e ignoran… respuesta sin clasificación. O No sabe / No contesta.).

Diego: Al boleo, pero creo que acierta. Dice que yo le leía Mujercitas por entregas. Ingresa en categoría clásicos infantiles de hoy y de siempre.

Hay que buscar otras opciones. No lo veo a Gus emocionado ante Jo que se corta su pelo. Cero discriminación de género. Sólo conocimiento del personaje.

Una vez le presté “El baile”, una novela de Irene Nemirovsky publicada en 1930. Es una historia chiquita, perfecta, con trama y desenlace a medida. ¿Y qué me dijo el muchacho cuando terminó esa pequeña obra de arte? “Lectura femenina”. O algo por el estilo.

Durante un tiempo me pregunté qué es la lectura femenina. No pude llegar a grandes conclusiones. A cambio entendí definitivamente que cada libro tiene su propio público. Íntimo, silencioso, puertas adentro. Pero público al fin.

Ahí me acordé de Gaby, la Rubia, una de mis chicas que realmente saben. (Digresión: les recomiendo leer en su última entrada de blog el cuento ganador del Rulfo. Inquietante. http://eblogtxt.wordpress.com/2012/12/14/el-juan-rulfo-para-samanta-schewblin/)

Bueno, en una charla con la Rubia de escritorio a escritorio cuando compartíamos oficina,  o de escritorio a compañera parada, cuando teníamos una sola computadora, o tal vez con vinito, copas manchadas y mareo, ella me contó una idea que merece ser realidad.

Gaby soñaba con instalar en un micrófono de radio o en cualquier otro espacio virtual de los que ella frecuenta un consultorio sentimental. Ojo, solos y solas no preparen teléfonos, o quizás si. Quien te dice se pueden conseguir una buena compañía. En el consultorio de la Rubia el objetivo es enganchar a cada libro con su mejor lector.

Acting: Quiero regalarle un libro a mi amigo Gus. Se leyó todo Henning Mankell (ese si le gustó cuando se lo recomendé). Entonces ahí nomás hace alguna pregunta que otra para completar el librodiagnóstico y se manda con la propuesta. ¿Por qué no probás con la saga de Montalbano, de Andrea Camilleri? Listo. Terminó la consulta. O sigue. ¿Y a su hija Palomita? Aja, me agarraste de sorpresa. Mañana te contesto.

Simple y maravilloso.

Ga, concretalo. Es un bien necesario para una humanidad desorientada.

Gus, no te preocupes. Se llama Andrea pero es hombre. Podés leer al Montalbano de Camilleri. Duda: ¿Lo tuyo no será misoginia literaria?

3 comentarios:

  1. Lo mío es absoluta, total y completa misoginia literaria. Pero no con todas. Doris Lessing me gustó y mucho. Pero mi primer pensamiento fue "no escribe como una mujer". Y ya leí algo de Andrea Camilleri. Y también me gustó. Y ojo, no le tengo miedo a Mujercitas. Pero por ahí la espero un poco más a Palometa. Gracias de todos modos y espero el libro.

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  2. jaja no puedo creer que recuerdes eso!!

    Efectivamente lo llevo adelante con conocidos que me mandan mensajes. El truco es que sólo acepto tres datos, cualquiera, pero tres. Ahora en fiestas, caen varios mensajes y yo feliz los contesto.
    En mi blog, hay ejemplos, creo que tendré que refrescar la idea en estos días... Mi querida Kaspineta, me hiciste reir mucho.
    beso grande

    Aquí la entrada: http://eblogtxt.wordpress.com/2009/04/15/recomiendo-libros-para-regalo/

    En cuanto a Palomita me faltan dos datos. Siete años.. y qué más. Así recomiendo..

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  3. Paloma: 7 años, gusta de lindas historias, princesa.

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